En nuestro día a día en la consulta atendemos a muchos pacientes que han llevado tratamientos de ortodoncia y no tienen una oclusión ideal. En la gran mayoría de los casos, los pacientes nos consultan porque “se les han movido los dientes”. Sus dientes no sólo no tienen una oclusión ni sonrisa ideal, sino que tampoco tienen una disposición adecuada. Antiguamente, no se le daba tanta importancia a la retención y estabilidad post-tratamiento como le damos hoy en día.
Elena llevó en dentición mixta un aparato funcional con el objetivo de expandir el maxilar (desarrollar la parte de arriba de la boca) y una vez terminado el recambio dentario, con toda la dentición definitiva en boca, comenzó un tratamiento de ortodoncia de segunda fase con aparatología fija multibrackets. Las técnicas más clásicas y los cánones estéticos más antiguos no expandían tanto las arcadas, y para conseguir espacio con el fin de alinear todos los dientes y coordinar las arcadas, le practicaron cuatro extracciones de sus primeros premolares maxilares y mandibulares. El caso terminó bien en su momento, pero la sonrisa no era amplia ni lucida.
Unos veinticinco años después, vuelvo a analizar el caso. Consideramos hacer un retratamiento de ortodoncia. La boca está en buen estado de salud, libre de caries y patología periodontal. La paciente hacía años que no portaba el retenedor removible maxilar (antes no se ponía uno fijo) y el retenedor fijo de la arcada inferior estaba fracturado en diversos puntos. A Elena, como paciente, lo que no le gustaba mucho era que su incisivo lateral maxilar izquierdo se estaba montando sobre el central, pero yo veía más cosas. Es mi prima y ya la tenía más que analizada. Las arcadas estaban comprimidas y, por tanto, los dientes “lucían poco”. También había un apiñamiento leve en la arcada maxilar y moderado en la arcada mandibular (aún no muy evidente para ella porque es joven, pero con el paso de los años, cuando enseñamos más la arcada inferior, lo hubiese notado) con torque negativo tanto del sector anterior como posterior (los dientes volcados hacia dentro). En el plano anteroposterior, la oclusión (la mordida) estaba en la norma con una Clase II de Angle molar terapéutica y Clase I de Angle canina, que lograron fundamentalmente por la extracción de las cuatro piezas. Atendiendo a la sobremordida, estaba disminuida casi con una mordida borde a borde y, para mi gusto, poca exposición dentaria en sonrisa. Los dientes anteriores no deben morder borde a borde ya que se desgastan precozmente.
Comenzamos un tratamiento de ortodoncia mediante el sistema de ortodoncia plástica Invisalign que duró quince meses. Los objetivos del mismo eran la correcta alineación, nivelación y coordinación de las arcadas mejorando la estética de la sonrisa y facial y una correcta función. A pesar de faltar piezas dentales, se logró ampliar la sonrisa y llenar los corredores bucales.
Elena acude a sus revisiones periódicas anuales para controlar su salud oral y la estabilidad del tratamiento de ortodoncia. Se instruye a la paciente en el mantenimiento de los retenedores y que contacte con nosotros si nota alguna alteración.
Laura Henríquez
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